ESTRENAMOS AÑO

Como ocurre todos los años desde que tengo uso de razón y sabiendo que no soy muy original, este añito recién estrenado, también viene cargado de buenas intenciones y de propósitos, que como siempre, se quedarán en agua de borrajas. Desde luego este año no tengo la más mínima intención de aprender inglés, es más, que los ingleses aprendan español y veran que bien nos entendemos y tampoco pienso ir al gimnasio, porque me da lo mismo tener michelines o no y desde luego me importa mucho más tener mi mente en forma, que mi físico este o no a la moda. Gracias a Dios, estoy en esa edad en que la moda me importa un bledo.
Lo que ya me empieza a preocupar un poco más son esas noticias sobre los desmanes de la Madre Naturaleza, porque empiezo a ver más claramente que el enfado que lleva es morrocotudo y que desde luego no nos va a dejar hacer tantas locuras como estamos haciendo y ella padeciendo estoicamente.
Y es que al ser humano le lleva al pairo lo que suceda con su forma de actuar mientras él siga tan ricamente enriqueciéndose y viviendo opiparamente y claro está que seres humanos ya somos muchos y muy desmandados, demasiado egoistas y dueños de un ombligo maravilloso que no hacemos más que mirarnos, sin importarnos lo más mínimo de lo que suceda a nuestro alrededor. Hemos perdido el norte y yo diria que también el sur y el resto de puntos cardinales. Tanto es así que en América han conseguido que cientos de pájaros mueran stresados por los fuegos artificales de la celebración del fin de año. No evolucionan tan deprisa el resto de especies animales, como evoluciona el rey de los animales, es decir el hombre (nombre genérico para el ser humano tanto hembra como macho, no me vayan a venir los puristas tontainas, esos de compañeros-as, ciudadanos-as, etc...etc... con la murga de siempre). Nosotros nos stresamos con otras cosas, por ejemplo: los impuestos, o con algo importante: las reuniones de los representantes de los trabajadores o con algo mucho más importante: la hora de la peluqueria, a la que siempre llegamos tarde y corriendo. En definitiva en este siglo XXI, se stresan ya hasta las piedras y pienso yo que porque demonios tenemos que tener tanta prisa, tanta ansiedad, tantas ganas de cargarnos al planeta y al vecino de enfrente si se pone a tiro. Alguna vez te has parado y te has querado mirando al cielo y pensando: "Mira esa nube tiene flroma de borreguito y esa parece un huevo frito..."? A que sí?...pués sigue haciendolo muchas veces más, que ese sea el propósito de este año que comienza. Frena tu vida, mira al cielo o a ese jardín en el que todavía con miedo nace alguna hojita o mira a los ojos de la persona que camina a tu lado en la vida, sonrie, tómale de las manos y deja que los corazones sincronicen su latido, el tiempo pasará de puntillas a tú lado y sin embargo reconocerás ese momento entre tus recuerdos. ¡ FELIZ AÑO NUEVO !